Es más sencillo persuadir a un público al comparar una figura psicológica con personajes de la televisión ya que existe una identificación casi inmediata con ciertos personajes que son valientes, audaces y útiles, sin embargo al igual que las monedas la personas tienen dos caras y hay rasgos que no logramos identificar tan rapido y que reflejan muchos elementos de una personalidad, por ejemplo, existen  las personas “catalizadoras”: son personas creativas, entusiastas y persuasivas aunque también pueden reflejar superficialidad, inconstancia y una actitud voluble, al final de cuentas que es lo que busca este tipo de personas? Reconocimiento, hacerse notar.

Otro de los perfiles que nos podemos encontrar en una organización es el del “apoyador”, una persona amable y comprensiva que es buen oyente, aunque en su lado negativo es inseguro y puede llegar a ser lento e ineficiente ya que se dedica a perder el tiempo con tal de agradar a los demás ¿qué es lo que esta persona  quiere? Aceptación. Podríamos enumeras múltiples rasgos que definen a una persona, algunos buenos y otros no tanto, lo interesante de estos perfiles es buscar la manera de trabajar en conjunto aprovechando cada una de las características que una persona nos puede brindar.